(Del libro “Un día, una historia”, de Jaime Retena, promovido por la Fundación Villacisneros)
El Papa Clemente XIII, mediante la bula “Quantum Ornamenti”, proclama a Ia Inmaculada Concepción patrona y protectora de España (1760). Se declara oficialmente el 8 de diciembre fiesta de carácter nacional.
La Inmaculada fue fiesta de guardar en todo el Imperio español desde 1644 (más de 200 años antes de ser decretada por la bula) y se declaró fiesta “de guardar” en toda la Iglesia desde 1708 por orden del papa Clemente XI. Sin embargo, ya desde 1585 como consecuencia del “milagro de Empel”, fue considerada como la Patrona de la Infantería Española.
Oficialmente no recibió el titulo de Inmaculada Concepción” hasta 1858, cuando la misma Virgen en una de sus apariciones en Lourdes a Bernardette de Soubirous, se autoproclamó como la Inmaculada Concepción.
La mayoría de los países sudamericanos mantienen esta fecha como fiesta nacional, y es patrona de un sinfín de municipios, pueblos, órdenes religiosas, colegios profesionales…
España y el fervor a la Inmaculada Concepción
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También, el 8 de diciembre de 1443: Nace Rodrigo Ponce de León, uno de los grandes protagonistas de la campaña que culminará con la toma de Granada y pone fin a la Reconquista de España.