Nuestra Señora de Atocha, que junto con la Virgen de la Paloma es patrona secundaria de Madrid, tras la principal, Nuestra Señora de la Almudena. Es venerada en Malta, en una pequeña iglesia erigida en la colina de Atocia, desde 1630.
La devoción a la Virgen de Atocha en Madrid se remonta a antiguo. Ya en el siglo VII aparece citada por Ildefonso de Toledo, y en el siglo XII en las Cantigas de Alfonso X el Sabio. La tradición popular cuenta que el Niño de Atocha llevó alimentos y bebidas a unos cristianos encarcelados por los moros, en un lugar llamado Atocha. En 1523, se encomendó la custodia de la modesta ermita a la Orden Dominica. Pío IX la elevó rango de basílica en 1863.
La imagen venerada en la colina de Atocia, la parte más antigua de Humrun (el emplazamiento donde los insurgentes malteses consiguieron liberarse del yugo francés) es una fiel réplica de la original madrileña. En maltés se conoce como ta’ Antijokja aka il-Madonna Tas-Samra, es decir, la Virgen Oscura, dando nombre a la iglesia que la alberga.
La iglesia Tas-Samra fue construida por Giuseppe Casauri, un rico comerciante de Birgu (rebautizada Città Vittoriosa después de la victoria del Gran Asedio turco de 1565) y su esposa Isabella nee Spinaci, también natural de Birgu. Precisamente Isabel era gran devota de la Virgen, desde que tuvo conocimiento de que, siendo bebé, se salvó milagrosamente durante ese asedio de los otomanos, tras un terrible bombardeo, por intercesión de Nuestra Señora
Giuseppi, que por sus negocios viajaba con frecuencia a España, en 1603 adquirió una bonita réplica de Nuestra Señora de Atocha, que al principio acogió en su casa, pero quiso mostrarla a la veneración de sus vecinos, por lo que decidió restaurar una capilla abandonada ― de hecho, había sido desacralizada en 1575 ―, dedicada a San Nicolás de Bari. En 1630, se completó la restauración de la iglesia, dedicándose a la patrona de Malta, Nuestra Señora de la Asunción. El altar mayor exhibe orgulloso la imagen de la Virgen de Atocha, que desde entonces es objeto de gran devoción por los malteses.
Jesús Caraballo
Muy interesante el artículo.
Muy interesante como siempre.
Por el nombre que se le da en Malta, pareceria que Atocha o Atocia seria (como dicen en Malta: Antijokja, es decir) Antioquia, el sitio de Siria donde por primera vez se nos llamo cristianos…