(Del libro “Un día, una historia”, de Jaime Retena, promovido por la Fundación Villacisneros)
«La reina Isabel II generaliza el uso de la bandera bicolor en todas las unidades del Ejército (1843).
Diseñada por Carlos III en 1785, fue declarada bandera nacional oficial en 1908. La intención principal fue la de evitar confusiones en la Armada, permitiendo una fácil identificación de los navíos a distancia.
La reina Isabel también extendió su uso a la marina mercante. A partir de entonces, este se generalizó, aunque hasta 1908 no se estableció como bandera nacional, de obligada presencia en todos los edificios públicos.
Según el artículo 4.1 de la Constitución,
«La bandera de España está formada por tres franjas horizintales, roja, amarilla y roja, siendo la amarilla de doble anchura que cada una de las rojas».
Desde su instalación oficial, la rojigualda ha permanecido constante en su forma y colores, cambiando únicamente el escudo según los gobernantes.