FINAL DEL REINO VISIGODO

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Egica

El sucesor del rey Ervigio fue su yerno Égica, es ungido en Toledo en noviembre del año 687 y ocupa el trono hasta el 702. Nada más acceder convoca un concilio que será el decimoquinto de Toledo en el año 688.  Égica había hecho un juramento a su antecesor de manera que debía proteger a su familia. En el concilio Égica argumentó que el juramento iba en contra de los intereses del conjunto de los habitantes del reino. Dijo que defender a los descendientes de Ervigio por sus actos injustos, iba contra su obligación como rey de hacer justicia en favor de los intereses de los habitantes del reino.

Los obispos asumieron parte de lo que el nuevo rey les pidió, combinaron ambos juramentos diciendo que el rey debía salvaguardar los intereses de todos los habitantes del reino a la vez que los de la familia de Ervigio, sin aplicarles trato de favor. Égica impulsó la restitución de los patrimonios que Ervigio había confiscado y de esta manera aplacó a los nobles contra posibles represalias hacia los descendientes de Ervigio.

En el Concilio III de Zaragoza (691) Égica regula que la viuda de Ervigio, Liuvigoto, debe recluirse en un monasterio de forma perpetua. Los prelados del concilio dieron el visto bueno a la resolución.

rey Ervigio

Égica tuvo que reinar entre los conflictos con la familia del rey Ervigio y las tensiones con ciertas facciones de la nobleza. Por este motivo, se levantó una revuelta contra el rey apoyada por la aristocracia  y parte del clero, contó con el apoyo de Sisberto, obispo de Toledo. En el año 693 se convoca el Concilio XVI de Toledo en el que se anotan los detalles de la revuelta, así como las medidas de represión de la misma. El rey entregó un tomus a los obispos con la versión oficial en torno al levantamiento producido contra el rey.

Entre el tomus y los cánones de los obispos se estableció el acuerdo para aplicar los castigos posteriores a un conflicto político resuelto a favor del rey. Se cita expresamente a Sisberto y a Liuvigoto, como implicados en la revuelta contra Égica. Sisberto fue depuesto, excomulgado y exiliado a perpetuidad, y todos sus bienes confiscados.

En el año 702 Égica emite una ley para tratar de controlar las fugas de esclavos y dependientes, que al parecer era frecuente. Se ordena a cualquier persona, cargos políticos del reino, clérigos y obispos, libres o siervos, que no acoja a fugitivos, tanto del mundo urbano como del rural, bajo fuertes castigos.

En el año 694 se reúne el Concilio XVII de Toledo, el último del que se conservan actas y listado de cánones. En él Égica entrega a los obispos un documento en el que se defiende la necesidad de hacer una purga definitiva contra los judíos, a los que acusa de tramar conspiraciones.

Witiza

Antes del año 702 Égica asoció al trono a su hijo Witiza, poco después del 700 fue ungido de modo que alcanzó la condición regia estando vivo su padre. La llamada Crónica Mozárabe de 754 presenta a Witiza como rey único tras la muerte de su padre en 702, y como moderado en su relación con la aristocracia. En la misma crónica se pueden leer las tensiones que Witiza tuvo con el clero.

A la muerte de Witiza en el 710, algunos grupos nobiliarios eligen como rey a Roderico, o Rodrigo, que probablemente era gobernador de la Bética. En la Crónica mozárabe de 754 se califica su ascenso como una ocupación (inuadit), que había tenido el apoyo del senado (ortante senatu). Rodrigo se encuentra en esa situación y enfrentado a la oposición política y militar de los familiares de Witiza, liderada por su hermano Oppas. Sin embargo los prohombres laicos y religiosos del reino no estaban por la labor de contar con otro miembro de la familia de Égica.

don Rodrigo

Sabemos que Rodrigo en la primavera del año 711 se encontraba en el norte peninsular combatiendo, contra los vascones o contra su opositor Akhila o Agila II que llegó a acuñar moneda en las dos provincias nororientales.

Los ejércitos mahometanos llevaban tiempo viendo a la península Ibérica como un territorio más que conquistar y aprovecharon la crisis política y socio-económica para entrar en el año 711. La invasión se produjo en un ambiente de guerra civil entre el rey Rodrigo y sus opositores. En julio de 711 se produce un hecho crucial en la historia de España, la batalla de Guadalete. El rey Rodrigo con todo  su poderoso ejército fue derrotado por las huestes musulmanas y de esta manera llegó la llamada “pérdida de España”.

Toledo cayó, las grandes ciudades como Córdoba y Mérida opusieron una gran resistencia antes de sucumbir. En la Tarraconense y en la Narbonenese se luchó durante varios años. Aun así, el glorioso Regnum Gothorum el sueño de Leovigildo, Recaredo y otros reyes ― llegó a su fin. En el norte de Hispania, en tierras astures, un noble godo llamado Pelayo comenzó a articular una resistencia que tuvo en el enfrentamiento de Covadonga el punto de inicio del largo camino que supuso la Reconquista. O mejor dicho la Restauración del reino perdido.

 José Carlos Sacristán

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1 thought on “FINAL DEL REINO VISIGODO”

  1. Recomiendo consultar el libro titulado » El ducado de Cantabria.El origen de un reino», de José Ramón Saiz, donde se explica detalladamente la historia de Pelayo, natural de La Liébana (Cantabria).

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