Estas rachas de marzo, en los desvanes
−hacia la mar− del tiempo; la paloma
de pluma tornasol, los tulipanes
gigantes del jardín, y el sol que asoma,
bola de fuego entre dorada bruma,
a iluminar la tierra valentina…
¡Hervor de leche y plata, añil y espuma,
y velas blancas en la mar latina!
Valencia de fecundas primaveras,
de floridas almunias y arrozales,
feliz quiero cantarte, como eras,
domando a un ancho río en tus canales,
al dios marino con tus albuferas,
al centauro de amor con tus rosales
(Antonio Machado, AMANECER EN VALENCIA)
CASTILLO DEL MILÀ I ARAGÓ (ALBAIDA)
En 1477 Juan II el Grande concedió el primer título de conde de Albaida a Jaime de Milá durante sus capitulaciones matrimoniales con Leonor de Aragón, hija de Alonso de Aragón, hermano de Fernando el Católico.
Su construcción data de los siglos XVI y XVII, siendo residencia de los marqueses, aunque parece ser que en anteriormente existió una casa señorial fortificada y que se aprovechó parte de su anterior construcción.
El castillo-palacio está situado en la Plaza de la Vila, una parte del recinto amurallado durante el siglo XV.
CASTILLO DE CHIREL
Está construido sobre una pequeña elevación llamada muela del Cinto del Castillo. Es de origen árabe y tuvo su importancia durante la revuelta de Al-Azraq (1247-1258) y en el siglo XVII, cuando se empleó como centro de las operaciones en las acciones durante la contención de las revueltas de los moriscos sublevados en la Muela de Cortes.
El castillo tenía una finalidad defensiva, tal y como refleja la técnica constructiva, las saeteras, los pretiles, las aspilleras, el foso o sus dos torreones.
A día de hoy se pueden observar el recinto amurallado, el aljibe y la torre mayor.
CASTILLO DE LOS CONDES DE CERVELLÓN (ANNA)
Este palacio está levantado sobre el antiguo castillo de Anna ya existente en el siglo XII.
La primera referencia que se tiene sobre el edificio data de septiembre de 1244, en una escritura de donación del castillo otorgada por Jaime I de Aragón a la Orden de Santiago, siendo maestre Pelayo Pedro Correa.
CASTILLO DE LA REINA MORA (BENIFAIRÓ DE LA VALLDIGNA)
Situado sobre la cima de un escarpado monte, a unos 237 metros sobre el nivel del mar, el castillo se sitúa en medio de dos profundos barrancos.
Se trata de una fortaleza de origen árabe construida a finales del siglo XI, con posteriores reformas cristianas realizadas por los monjes cirtencienses a partir de 1287.
Inicialmente este castillo tuvo la función de refugio de la población que habitaba en las alquerías próximas. Más tarde el castillo tomó el nombre de Marignen o Marynen y el nombre de Reina Mora deriva de una leyenda según la cual una reina se tiró al precipicio desde este castillo.
El castillo participó en 1364 en la Guerra de la Unión entre Castilla y Aragón como refugio de los monjes al ser invadidas estas tierras por las tropas castellanas.
CASTILLO DE BAIRÉN (GANDÍA)
El castillo se encuentra en la parte superior de un montículo a 106 metros sobre el nivel de mar, entre la Sierra de Mondúver y la Marjal de Gandía.
Es probable que fuese una fortificación romana, desde la que se dominaba el mar. En 1097 se produjo ahí una batalla entre los almorávides contra El Cid y Pedro I de Aragón. La narración de este hecho, mencionado a la Historia de Roderici Campidocti, es la primera documentación escrita en la que aparece el castillo. Un siglo después, Al-Idrisi también lo plasma en su obra.
E si vos comieredes don yo sea pagado, a vos é dos fijos dalgo quitarvos he los cuerpos, é darvos he de mano. Quando esto ovó el Conde yas’ iba alegrando: Si lo ficieredes, Cid , lo que avedes fablado.
En 1240 pasó definitivamente a manos cristianas gracias a Jaime I de Aragón el Conquistador, en 1240 tras la rendición de Abecendrel.
CASTILLO DE LA ENCOMIENDA (ENGUERA)
De origen musulmán, posiblemente construida entre los siglos XI y XII.
Tras la Reconquista, las tropas castellanas, dirigidas por Pedro Núñez de Guzmán tomaron el castillo, y tras su incorporación al reino de Aragón por parte de Jaime I el castillo de Enguera, el de Garamoixent y el de La Mola fueron cedidos a la Orden de Santiago, constituyendo, dicha orden, la Encomienda de Enguera.
Su situación fronteriza tuvo siempre una gran importancia estratégica, por lo que se mantuvo en uso hasta su demolición en 1365, ordenada por Pedro IV de Aragón, el Ceremonioso, para evitar que pudiera ser utilizado por las tropas castellanas durante las Guerras de la Unión.
En 1575, en el documento en el que la corona vende Enguera a la familia Borja se hace constar que el castillo se encontraba caído.
CASTILLO DE AYORA (AYORA)
De origen musulmán, la primera mención que se hace del castillo la hizo el geógrafo musulmán Al-Idrisi en el siglo XII, siendo reconstruido en su totalidad tras ser reconquistado el Valle de Ayora por tropas aragonesas (1239-1243).
Con la firma del Tratado de Almizra en 1244 entre Castilla y Aragón, Ayora quedó en poder de los castellanos. Por el Tratado de Campillo, firmado en 1281 entre Alfonso X el Sabio y Pedro III el Grande pasó de nuevo a manos aragonesas.
El castillo se encuentra en ruinas desde que en 1707 las tropas de Felipe V, al mando del conde de Pinto, lo tomaron por asalto. En 1797 el botánico Antonio José Cavanillles describió la plaza como un lugar arruinado y destrozado (Observaciones del Reino de Valencia).
En 1812 los franceses ocuparon el valle y terminaron con lo poco que quedaba del castillo.
CASTILLO DE RIBARROJA DEL TURIA
Sobre los cimientos del castillo hay restos romanos, visigodos, de la época musulmana y morisca.
Tras la rendición de Riba-roja a Jaime I en 1238, ésta pasó a formar parte del señorío territorial de Pedro Fernández de Azagra, pasando en 1348 a manos de Ramón de Riusech y Moraida en 1348 tras la Guerra de la Unión entre los unionistas valencianos y los realistas.
Como la población de Ribarroja era morisca, su expulsión en 1609 produjo un enorme decaimiento demográfico y económico, con lo que el castillo perdió su relevancia.
CASTILLO DE LOS AGUILAR
El actual Castillo de Alaquàs es el resultado de un gran proyecto constructivo datado a principios del siglo XVI. Margarita de Les Velles fue quien inició parte del proyecto en el comienzo de su señorío en el año 1489. Margarita era la segunda esposa del señor de Alaquàs Jaume García de Aguilar y en los once años de su señorío consiguió sanear las finanzas familiares y concentrar el patrimonio de la familia mercantil de les Velles, el de los juristas Amalrich y el de la familia señorial de los Aguilar.
CASTILLO DE JÁTIVA
Este castillo tiene sus orígenes en una construcción ibérica que aprovechaba una de las partes más altas de la montaña. Los romanos, al conquistarla, añadieron en el otro punto elevado que presentaba la montaña una segunda fortaleza que se comunicaba con la anterior.
Cuenta la leyenda que por la llamada Torre Cuadrada entró Aníbal en el castillo y, años después, Publio Cornelio Escipión.
Ambas fortificaciones fueron reformadas por los árabes, manteniendo su estructura durante la conquista de Jaime I, la rebelión de las Germanías y la guerra de Sucesión.
Qui en Xátiva volrá entrar, sobre nós haurá de pasar (Jaime I- Crónica)
En su época se consideró al castillo de Játiva una de las mejores fortalezas, no solo de la Corona de Aragón, sino de toda la península.: por un lado, la parte que da al interior montañoso de Valencia, la fortaleza estaba protegido por los acantilados de la sierra Vernisa, mientras que por el otro, los atacantes debían superar una muralla principal que protegía toda la ciudad, y en segundo lugar varias murallas secundarias.
En la guerra de Sucesión se utilizó artillería pesada, capaz de echar a perder en poco tiempo las anticuadas murallas que defendían la ciudad. Consciente de eso, el general de las tropas austriacistas de Valencia Juan Bautista Basset reforzó todas defensas. Su esfuerzo le sirvió por salir con éxito de un primer asedio a Játiva en mayo de 1706, pero al año siguiente, ya sin Basset y ante una artillería más pesada, las murallas de la ciudad fueron asaltadas en dos puntos y el castillo sufrió muchos daños, si bien no se pudo llegar hasta el castillo.
El castillo fue utilizado en la Guerra de Independencia, entrando luego en decadencia.
CASTILLO DE SAGUNTO
Está situado en lo alto de una colina de la Sierra Calderona, donde se puede controlar la ciudad y el mar. El Cid conquistó la plaza a los musulmanes, aunque no fue hasta la llegada de Jaime I cuando quedó definitivamente en manos cristianas.
CASTILLO DE CULLERA
Construido en el siglo XIII y situado en la ladera de una colina. Sobre las ruinas del castillo musulmán mandó construir uno nuevo el rey Jaime I en el siglo XIII, siendo restaurado por Pedro IV el Ceremonioso.
Como alcázar real, fue morada de todos los monarcas aragoneses en sus visitas a Cullera.
CASTILLO DE MONTESA
Originario de la época celtíbera o romana ruinas, hasta los siglos de la invasión musulmana no ganó relevancia. Entre el XIV al XVI se construyó el convento de la orden de Santa María de Montesa por orden del rey Jaime II y en 1748 un terremoto destruyó el castillo.
CASTILLO DE REQUENA
La Alcazaba o castillo de Requena, tiene origen musulmán. Construida en el siglo X, 500 años más tarde se levantó sobre ella una torre de homenaje cristiana
CASTILLO DE BUÑOL
Es uno de los castillos más importantes de España debido a su dimensión y por su ubicación, al encontrarse en la antigua frontera entre Valencia y Castilla.
Con origen romano, fue construido por los árabes entre los siglos XI y XII sobre terreno rocoso, entre el barranco del río Buñol y el de Borrunes. Jaime I lo donó a Rodrigo de Lizana en 1238, que a su vez lo cedió a la Orden militar del Hospital. Siglos después fue escenario de la invasión francesa y de las guerras carlistas.
CASTILLO DE BÉTERA
Castillo de la época musulmana con una función de defensa de las alquerías musulmanas que poblaban sus alrededores.
En 1364 el rey Pedro II el Ceremonioso ordenó el derribo del castillo y sus murallas, siendo nuevamente reedificado años después. Años más tarde, el castillo fue testigo de la batalla entre las fuerzas del mariscal Suchet y las tropas de O´Donnell en 1811.
CASTILLO DE BENISSANÓ
Construido en la segunda mitad del siglo XV, es un palacete dentro de una fortaleza. fue residencia de familias nobles, y en 1525 Carlos V encarceló aquí al rey Francisco I de Francia tras la Batalla de Pavía camino de Madrid.
CASTILLO DE COFRENTES
Fortaleza islámica del siglo XI, ha servido de fortaleza, por lo escarpado e inaccesible del lugar, y de palacio durante los siglos XVI y XVII.
CASTILLO DE EL PUIG DE SANTA MARÍA
Data del siglo XI y se conoce como castillo de Yubayla, Cebolla o Enesa.
En 1093 fue tomado, reconstruido, fortificado, y rodeado de una villa amurallada por el Cid. Posteriormente volvería a manos musulmanas, dando el castillo protección al acceso por el norte a la ciudad de Valencia.
En 1237 la población fue conquistada por las tropas de Jaime I. En la retirada musulmana, fue destruido por Zayyan para que el rey no pudiera utilizarlo para conquistar Valencia, y ese mismo siglo fue reconstruido. En 1240 el rey cedió parte de los territorios a Arnau de Cardona. Finalmente, en 1365 Pedro IV de Aragón mandó destruirlo.
TORRE DE PATERNA
Las primeras noticias que se tienen del castillo datan del siglo XI.
Fue en el año 1094 cuando Rodrigo Díaz de Vivar llegó a las puertas de Valencia. Durante el cerco, el reyezuelo moro Alcadir fue asesinado por sus huestes y le sucedió Aben-Gehaf, quien pactó con el Cid la entrega, pero por una de sus cláusulas el castellano no pudo habitarla, siendo Paterna el sitio elegido donde acampó. Y es aquí, por orden del Cid, donde se edifica el castillo, construido por alarifes árabes.
El Cid permaneció allí hasta su muerte. Su esposa, doña Jimena, no pudo contener el empuje de los almorávides y en el año 1101, Paterna, con su Castillo, cayó en poder de los moros.
No será hasta el 10 de abril de 1237 cuando Paterna caiga en poder de Jaime I, haciendo entrada en la plaza junto a caballeros de noble estirpe. Doña Violante, esposa del rey Jaime I, quedó en Almenara donde la real pareja celebró la Pascua en 1238, y desde allí la Reina fue conducida a Paterna con una guarnición de diez caballeros. En 1279, el rey hizo donación a perpetuidad de las tierras de Paterna junto con su castillo a Artal de Luna, noble caballero aragonés. Un descendiente de los Luna casó con Doña Violante, hija del rey, creando el condado de los Luna.
El castillo tuvo relevancia durante la Guerra de La Unión, teniendo como hecho más relevante la batalla de Mislata. Los derrotados, la nobleza valenciana que se unió a la aragonesa en la lucha contra Pedro, fueron bien degollados, bien arrastrados por la ciudad o se les hizo tragar por la boca el metal derretido de la campana que tañeron para llamar a consejo.
Paterna fue sometida al asalto en 1348 por Lope de Luna, quien ordenó el desmantelamiento y la demolición del castillo para que nadie pudiera hacerse fuerte, resistir o atacar.
CASTILLO DE SERRA
Fortaleza de origen árabe de reducidas dimensiones construida alrededor del siglo XI. Pertenecía al sistema defensivo del norte de Valencia, junto con los castillos de Náquera y el de Olocau.
Alfonso VI de Castilla envió un pequeño ejército comandado por Alvar Fáñez, primo del Cid, a Valencia, y aquel tomó posesión del castillo de Serra en 1086.
En 1094 el Cid conquistó la capital valenciana y, para asegurarse las comunicaciones en la retaguardia, tomó posesión de los castillos del Real y de Serra, ya que los consideraba imprescindibles para tomar el castillo de Sagunto.
Ricardo Aller Hernández