CComo ya sucedió con Leovigildo y Recaredo, la fórmula de unión entre padre e hijo volvió a funcionar con Chindasvinto y Recesvinto. Chindasvinto alcanzó la cima del Regnum Gothorum a la edad de 79 años, el control de la nobleza y de la administración le obsesionaron.

No le tembló el pulso a la hora de tomar decisiones. En la  Cronica de Fredegario se recoge la severa represión que cometió contra doscientos primates godos y quinientos mediocres, aplacando de esta manera cualquier foco de levantamiento de la nobleza. No quedó aquí el castigo, sino que, las tierras de los purgados, sus mujeres e hijas fueron confiscadas para ser entregadas a los nobles más afectos. Esto le llevó a ser conocido como el “demoledor de los godos”.

Chindasvinto convocó un concilio nacional, en su intento por controlar las bases del Estado la Iglesia era una pieza fundamental. Así queda reflejado en las decisiones tomadas en el VII Concilio de Toledo del año 646. Chindasvinto no respetó la normativa adoptada en el IV concilio, su autoritarismo e intervencionismo fueron únicos. Bien es cierto que sin el apoyo de determinado sector de la aristocracia sus medidas no habrían salido adelante, como se vio claramente en la asociación al trono de su hijo Recesvinto en el año 649.

Chindasvinto tuvo que lidiar con los incansables norteños, que se volvían a rebelar constantemente como ya habían hecho contra los anteriores reyes godos. Con los suevos y bizantinos vencidos años atrás y los francos apaciguados, los nobles se emplearon a fondo contra las poblaciones de vascones.

Chindasvinto envió a Roma al obispo de Zaragoza, Tajón, personaje de gran nivel cultural, continuador de la obra de san Isidoro de Sevilla y san Braulio de Zaragoza. La intención fue la de conseguir copias de las obras del papa Gregorio Magno. En el año 653, tras cuatro años de asociación al trono con su hijo, murió a los 90 años de edad.

El proceso de sucesión de Chindasvinto recuerda al de Leovigildo y Recaredo, se pasó de un reinado enérgico y autoritario a uno más prudente y arbitral. Recesvinto, al estilo de Recaredo, se apoyó en la Iglesia y suavizó la política de su padre, llegó a gobernar casi veinte años en solitario. Recesvinto tuvo que hacer frente a una rebelión liderada por un caudillo llamado Froya o Froja. Se cree que pudo ser un conde de la Tarraconense. El líder rebelde contó con dos apoyos importantes: los opositores a su padre y a una tropa de guerreros vascones. El centro de la contienda se dio en el valle del Ebro, la situación se agravó cuando los vascones decidieron asediar y someter Zaragoza. Los defensores de la ciudad resistieron varios meses hasta que el ejército de Recesvinto llegó a aplastó la rebelión.

Observamos un hecho que nos indica el sentimiento religioso de los monarcas godos, según una inscripción que se encuentra en la iglesia de San Juan de Baños (Palencia). Cuando Recesvinto regresaba victorioso a Toledo se sintió enfermo, se detuvo en aquella zona a beber agua de un manantial que parecía poseer capacidad curativa, la recuperación rápida del rey hizo que éste decidiese levantar una iglesia bajo la advocación de San Juan Bautista. Desde ese momento Recesvinto tomó la decisión de aplicar una política suave que diese estabilidad y evitase las conjuras palatinas, al parecer surtió efecto a la vista de los años que se mantuvo en el trono.

Durante el periodo de Recesvinto se convocaron tres concilios en Toledo: dos nacionales, el VIII en el año 653 y el X en el año 656, y uno provincial, el IX en el año 655. El más relevante de ellos fue el VIII, en el que cabe destacar lo siguiente:

• Se decidió el cambio de rumbo de la política con la intención de suavizarla.
• Se discutieron las propiedades que correspondían a la corona derivadas de las confiscaciones que hizo Chindasvinto.
• El monarca se mantuvo firme en la oposición a los que se atreviesen a alzarse contra el rey.
• Los monarcas debían ser elegidos por los nobles del reino y los obispos en la urbs regia.
• Este concilio fue el primero en el que las actas fueron suscritas no sólo por el rey y los obispos, sino también por los abades de los monasterios y por los magnates del reino.

Pero lo más importante del reinado de Recesvinto, y por lo que ha pasado a la Historia, es la promulgación en el año 654 del Liber Iudiciorum, un hito legislativo que muestra el ansia de unificación que tuvo el rey. Significó la unión legislativa de todos los habitantes del reino sin contar con los judíos, que permanecieron ajenos a esta unión por cuestión de fe, por ello recibieron severas leyes y llegaron a firmar un placitum en el año 654 como promesa a la religión cristiana. Del Liber Iudiciorum destacamos:

• todos los habitantes del reino, incluido el rey, quedan sujetos a las leyes.
• Consta de doce libros con más de quinientas leyes que incluyen leyes del código de Eurico y Leovigildo así como algunas de Recaredo y Sisebuto, más un destacado número de las de Chindasvinto.
• La nobleza y la iglesia católica llevan el peso del reino.
• El sistema administrativo avanzó hacia una mayor militarización.
• El Liber Iudiciorum estuvo presente en los reinos cristianos tras la invasión musulmana. Así se aprecia en el siglo XIII en Castilla como el Fuero Juzgo, que influyó en la legislación de reyes como Fernando III el Santo y Alfonso X el Sabio.

José Carlos Sacristán

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