
Oh Dios, que fortaleciste en la confesión de tu nombre a los gloriosos mártires Emeterio y Celedonio, concédenos propicio que, pues veneramos sus cuerpos en la tierra, gocemos de su compañía en el cielo.
Por nuestro Señor Jesucristo, amén.
(Oración a san Celedonio)
LOS PERSONAJES

Calagurris
Año 298. Celedonio, soldado del imperio romano, oriundo de Calagurris (actual Calahorra) fue decapitado en esa ciudad por profesar el cristianismo, lo mismo que Emeterio, quien posiblemente era su hermano.
Esta fraternidad la hallamos en los códices y breviarios, en los autores que los consideran como hermanos de sangre. No obstante, lo obvio y lógico de esta fraternidad estriba en la identidad de lugar de nacimiento, de profesión militar y de tormentos, puesto que cristianos ambos se habían amamantado juntos en la misma cuna de la diócesis calagurritana; juntos habían compartido en la legión Romana los días felices y las fatigas de la vida militar; juntos habían sido detenidos y aherrojados a las cárceles y juntos también bajarían al arenal de Cidacos donde murieron y donde hoy se levanta la catedral (Jesús Fernández Ogueta, Santos Emeterio y Celedonio, mártires, Año Cristiano, Biblioteca de Autores Cristianos, 1959, p.485).

Diocleciano
El martirio se produjo durante la persecución de Diocleciano o en la de Valeriano cuando fueron encarcelados y puestos ante la alternativa de renunciar a su fe o abandonar la profesión militar.
Los dos fueron encarcelados en el lugar llamado Casa Santa, siendo decapitados en el arenal del río Cidacos, en las afueras de Calahorra, lugar donde más tarde se levantó la actual catedral.
Dice la leyenda que al morir, Emeterio lanzó su anillo al cielo y Celedonio su pañuelo, a la vista de todos (Cantabria liberal.com).
La fe popular afirma que las cabezas de los santos fueron trasladas a Santander a bordo de una barca de piedra para protegerlas de la invasión musulmana. Durante el trayecto, la barca chocó a la entrada de la bahía contra una roca, acabando en una cueva, donde serían descubiertas y custodiadas por una comunidad de monjes que allí vivía.
La Horadara dice el pueblo
que allí cerca gana el pan,
más la Peña de los Mártires
llamose tiempo atrás.
(Amós de Escalante)
El monasterio de ese lugar los tomó como patronos y sus efigies formaron parte del escudo de la iglesia del Cerro de Somorrostro.
La historia de los Santos Mártires tiene orígenes medievales en Santander, ya que en las constituciones del abad D. Nuño Pérez en 1310 se refiere a la iglesia con el nombre de los Santos Mártires Emeter et Celedon pues desde tiempo inmemorial fueron patronos de la iglesia y de la villa.

En los siglos VIII y IX, durante el reinado de Alfonso II de Asturias, el monasterio pasó a ser abadía, siendo promocionada en el reinado de Alfonso VII de León a colegiata, siendo en los siglos XIII o XV cuando comenzó a construirse la iglesia superior.
En 1533, se redescubrieron las reliquias situadas en la antigua cripta de la hoy conocida como la Iglesia del Santo Cristo. Este suceso no nos debe extrañar pues en ocasiones se escondían las reliquias importantes para prevenir su robo o saqueo, provocando que posteriormente no se conociera o recordara su localización exacta dentro de la Iglesia o edificio en donde se situaban (santander.es)
Las cabezas reposan hoy en día en la actual catedral construida sobre la antigua abadía de tiempos de Alfonso II. El resto de ambos cuerpos se veneran en la Catedral de Calahorra.
La justicia y el Ayuntamiento expresaban al Cabildo el deseo grande del pueblo de celebrar la procesión solemne con las Santas Cabezas que de tiempo inmemorial se viene celebrando (Acta de 1676).
En 1743, el obispo Menéndez Luarca consagró una de las campanas de la abadía con el nombre de “campanón de los Santos Mártires”
Siempre que hay tormenta o borrascas de mar se hace tocar la campana para avivar la fe y dar a los que peligran [marineros] el consuelo de que todo el pueblo se acuerda y compadece de ellos y los encomienda al patrocinio de los abogados (Martínez Mazas).

José María de Pereda
Este hecho ha tenido continuidad a lo largo de los siglos, tal y como refleja el libro “Sotileza”, de José María de Pereda:
Sonó una tarde [el “campanón”], retumbante, acompasado, lento y fúnebre cuando la fragata La Unión era empujada por las olas de un modo fatal e inexorable hacia las Quebrantas.
En 1754, la colegiata pasó a ser catedral, creándose la Diócesis de Santander, hecho que facilitaría que en 1755 se concediese a Santander la categoría de ciudad y capital de provincia.

Pío VI
En el año 1791, el papa Pío VI declaró a san Emeterio y san Celedonio como patrones de la diócesis a petición del obispo Menéndez de Luarca. Los Santos Mártires Celedonio y Emeterio son patronos de Calahorra, Santander, de su diócesis y de otros pueblos de Cantabria como San Pedro del Romeral, Unquera y Rasines o la burgalesa Río Quintanilla. Litúrgicamente, su festividad se celebraría originalmente el 3 de marzo, fecha del martirio de San Emeterio y San Celedonio, aunque a partir de 1669 se cambió al 30 de agosto. En Rioseco de Santiurde, un pequeño pueblo próximo a Reinosa, se celebra los días 30 y 31 de agosto.
TOPÓNIMO DE SANTANDER
Existen diversas teorías que asocian a los dos santos con el origen del nombre de la ciudad de Santander.

Monasterio de san Emeterio y san Celedonio
El topónimo Santander deriva del hagiónimo SANCTUS EMETERIUS ‘san Emeterio’ como resultado abreviado de la construcción latina MONASTERIUM SANCTI EMETERII ET SANCTI CAELEDONII ‘el monasterio de san Emeterio y san Celedonio’, con pérdida del sustantivo y del segundo término (toponhisp.org)
Existen otras hipótesis sobre el origen del actual nombre de Santander a partir de la existencia de la ermita de San Andrés, emplazada en la falda opuesta de la colina que va desde San Román- Peñacastillo hasta el Sardinero, lo que no minora la importancia del primitivo monasterio ni al hecho de que la población próxima al enclave se llamase de “San Emeterio”.
En un mismo siglo XII y otros posteriores, y en el reinado de Alonso VIII se encuentran memorias que refieren el abad, el monasterio, el puerto y la villa de Sant Anderio, que es el nombre que ha prevalecido hasta ahora, y otras con del de Sancti Emetherii, lo que prueba que tenían ambos nombres.
Otra hipótesis, formulada por Juan Castañeda, considera que el nombre de Santander deriva de Santanderium (“lugar a donde están los santos”).

Ricardo Aller Hernández
FUENTES:
*Jesús Fernández Ogueta, Santos Emeterio y Celedonio, mártires, Año Cristiano, Biblioteca de Autores Cristianos, 1959, p.485).
*https://lacritica.eu/noticia/2956/santos-con-historia-ii/san-celedonio:-que-significa-martir.html
*https://es.wikipedia.org/wiki/Celedonio
*https://toponhisp.org/es/toponimia-de-aragon-cantabria-y-la-rioja/toponimo/santander#:~:text=El%20top%C3%B3nimo%20Santander%20deriva%20del,sustantivo%20y%20del%20segundo%20t%C3%A9rmino.